Más dioses que Reyes y ninguno que sabía gobernar

Reza el dicho: "Al Cesar lo que es del Cesar", y en este término Ridley Scott lo cumple a rajatabla. En su nuevo film el director relatara una de las historias bíblicas basadas en la liberación del pueblo hebreo de manos de los egipcios. El film que le trajo nuevamente a tierras españolas para ser rodada entre Almeria y Fuerteventura, además de haberse rodado varias escenas en Marruecos. Con un reparto de lujo donde el propio Ridley Scott no contó atrás su pupilo, Rusell Crowe, el cual interpreto a Noé en esa pésima película, para ir acogiendo a nuevos rostros, en esta ocasión será Christian Bale el que interprete que se pondrá en la piel de Moises, o como le llamaron su propio pueblo, "Príncipe de Egipto". Con Joel Edgerton como Ramsés II hermano de Moisés, John Turturro como Seti I, y Sigourney Weaver como su esposa, Tuya. Harán un gran equipo donde la confianza y la traición se verán equiparadas dentro de unos tiempos muy turbios para el imperio egipcio. Si en anteriores versiones destacaban la hermandad entre Ramsés y Moisés, aquí destacan la competencia que habría entre los dos. La típica historia de un padre que tiene a su hijo adoptado y que confía y venera mucho más que al de su propia sangre. Parece que estuviera contando la historia de Gladiator...



Si juntamos las historias de "El reino de los cielos" y "Gladiator" lo agitamos bien agitado, al servirlo nos sale un guión muy bien escrito llamado "Exodus: Dioses y Reyes", el film que romperá muchas lanzas a la hora de dar crédito a la ayuda divina, dejando a Moisés como un guerrero, pero solo un profeta de la palabra de dios. Esto hace que realmente cualquiera de las historias que nos han ido contando sobre la historia de las sagradas escrituras sea reescrita una y otra vez. O al menos el cine nos lo pone como tal. Con unas interpretaciones magistrales, y una recreación digitalizada dentro de las escenas panorámicas de la ciudad. Exodus: Dioses y Reyes es una película que te tiene entretenido con unas escenas de lucha brutales, las cuales obtienen un punto álgido al film. Por otro lado la historia en sí, como he dicho antes. Es otra vuelta de tuerca dentro de los relatos bíblicos.

Nota. - 7/10.