Aunque la historia se sitúa un año despues de haber encontrado al pequeño Nemo, en realidad han pasado 13 años desde que vimos en las grandes pantallas, las aventuras de los peces payaso, y el pez cirujano azul. En otras palabras, Nemo, Marlin, y la olvidadiza Dory. Un pez que tiene grandes problemas de pérdida de memoria. Llegando a tener una personalidad, que ha arrollado a su gran público, consiguiendo dar el salto a su propia película, con la compañía inestimable de sus dos amigos. Siendo un film con el que vuelve a contar con Andrew Stanton a la dirección, acompañado como segundo el director Angus MacLane (BURN-E, Toy story de terror). Como ya demostró en su primera película, su secuela, se vuelve a colar en el cine de animación por todo lo alto. Razones para ello no la hace falta. Posee un guión muy dinámico, unos personajes secundarios que dan mucha fuerza a la trama y un paso hacia adelante dentro de las aventuras acuáticas, es decir, bajo el mar. No se han guardado nada y en eso se ve fácilmente, que los estudios Disney han puesto todo en el asador para que su secuela, esté dentro de la lucha por obtener otro premio de la academia. Como llegaría a lograr su antecesora "Buscando a Nemo".Buscando a Dory vuelve a apostar por el centro familiar, ya seas de sangre o no. Como en casos puede que la amistad sea ese lazo de unión, para que luches por personas que realmente sientas cercanas a tí mismo. Aquí es donde manda todos los detalles, que hasta los más pequeños, son importantes para poder confeccionar una historia. En la que te enseña a apreciar a cualquier persona, por muy diferente que sea. Eso sí, por favor. Tomense esto como una metáfora. Y dejen que los peces reales, los que estan fuera de los estudios de animación, sigan en libertad. Muchos de ellos no se adaptarán en un entorno muy pequeño, y perecerán. Como es el caso del Pez payaso. Por un mar aún más rico en diversidad marina. Gracias.
Nota: 8'5/10.
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