Canción de Nueva York, Mar Webber hace una gran historia, que no conmueve

Después de a ver filmado las dos fallidas "The amazing Spider-man", el director Marc Webb regresa a los fueros, con los que se dio a conocer, y para su cuarto film. Vuelve a evocar a el gran Woody Allen, como inspiración, para su nuevo film. Una comedia-romántica, donde se basa en uno de los pilares fundamentales, para poder entender a la sociedad neoyorquina, a través de la ventana del Séptimo arte. Canción de Nueva York, llega más hacia los tintes del dramatismo, con la presencia de actores como Pierce Brosnan, el cual le tendrían que pegar una buena patada en sus miembros, para que pudiera sacar una simple lágrima, en las escenas, más evocativas; A Jeff Bridges, el cual vuelve a la ciudad, donde le dio la fama a finales de los setenta, bajo otro tipo de género, y que en esta ocasión, más sentimentalista. También encontramos a Cynthia Nixon, más conocida por su interpretación de Miranda Hobbes, en la serie de "Sexo en New York". Como nuevas promesas, al actor Callum Turner (Queen & Country), o, la actriz Kate Beckinsale (Underworld, Mucho ruido, y pocas nueces). El film en sí, en su conjunto queda bastante redondo. El director Marc, sabe cómo relatar su historia, y hacerla llegar al espectador, pero no llega a emocionar, y queda bastantes lagunas en las que el propio actor, o actriz, no sabe cómo desenvolverse, en un papel, que a primeras tintas no entraría en la alfombra roja de Hollywood, pero si en los premios razzie.


Que dificiles son las relaciones, cuando no esperas nada, y al mismo tiempo, lo quieres todo. Canción de nueva York, habrá de pérdidas, y de desamores, de encuentros y reencuentros con sí mismos. Y aunque diga la película, que para poder salir, tienes que entrar, hay juegos, de los cuales, si los esquivas, llegas a ganar mucho más. Evitables, o inevitablemente. Tal vez, porque aveces la realidad, se tercie como tan real, que nunca la podamos entender como tal. Y aquí, es donde los personajes de "Canción de New York", pasa a ser una trama muy bien confeccionada, bien interpretada, pero la falta esa expresión, para que conmueva. Pues aunque quieras echar una gota de lagrima, ya te digo que no lo llegaras a lograr.
Pierce Brosnan, el eterno y nuevo, típico caballero inglés. Para mi, un gran desacierto haberlo quitado de la saga de james Bond, tan pronto. Él tenía una carisma que el actual Daniel Craig, no ha llegado a transmitirme. Pero que en películas, como la que hoy os estoy nombrando, no llega a colar del todo. ni el propio Jeff Bridges, el cual siempre se ha defendido muy bien en los papeles dramáticos, sabe llegar a redondear el personaje de esta historia. La cual es muy técnica, todo está en su lugar, no hay nada que se le pueda reprochar. Pero sigue siendo un drama romántico, y no llega a dar ese punto final, el que te llega a conmover, una historia, que tal vez, la has visto muchas veces, y que, en algún momento, te suene tan familiar. 

Nota: 6'5/10.

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