La caza de un asesino, Magnus Schmitz nos regala el mejor asesino en serie de la televisión actual

El canal de streaming español FILMIN, incorporó a su catálogo el nuevo trabajo del cineasta sueco Mikael Marcimain. Reconocido director de series, el cual empezó en el mundo de lo audiovisual, dirigiendo spots publicitarios, así hasta llegar a tener en su haber varios films. Destacando entre ellos "Call girl (2012)", trabajando dentro del suspense nos deja títulos para la pequeña pantalla como: "The grave (2004)" o "Wallander (2005)". Para esta ocasión nos trae una miniserie de 6 capítulos basados en el asesinato de una niña de 10 años. En el noroeste de Skåne, en la provincia de Skania (Suecia). Contando con  el siguiente reparto para su recreación: Anders Beckman (Estocolmo, Estación Central) como Per-Åke Åkesson; Lotten Roos (Más Allá), como Monica Olhed; Håkan Bengtsson (Más allá), como Erik Johansson; Rasmus Troedsson (The restaurant), como Kriter Berg; Magnus Schmitz (Strawberry days), como Ulf Olsson; Sasha Becker (Antes de la tormenta), como Jannica Ekblad; Kristina Brändén Whitaker (Johan Falk: Madre de todos los robos), como Majvi Nilsson y Christian Fex (Asesinos sin rostro), como Arne Svensson.


Basada en los hechos reales, sobre un brutal asesinato de una niña de 10 años, Helen Nilsson, en 1989. El director Mikael Marcimain nos relata a través de 6 episodios, la investigación de tal asesinato, el cual podría haber pasado sin ser resuelto. A pesar de las numerosas pistas que podría llegar a dejar el asesino, y los escasos medios que pueden llegar a tener el cuerpo de policía. 

A pesar que la serie, en su primer capítulo, tiene un buen comienzo. Esta misma no tiene un nivel uniforme, con muchos altibajos que hacen que pierdas totalmente la trama. Dejando de lado el caso en sí, para pasar a ver las carencias de cada uno de los protagonistas. Estando en un caso que, según su estatus tendría una pronta resolución, pero el prestigio sin medios, es como los milagros. Justos. Dejando a la serie con demasiado metraje, si la hubieran quitado un capítulo, estoy seguro que no hubiera modificado en nada. Por lo contrario, hubiera ganado mucho más ritmo a la hora de poder contar todo lo acontecido.  

Su punto fuerte está en las interpretaciones. Llegando a ser el antagonista de la historia, el asesino, uno de los mejores papeles que he llegado a ver últimamente, en casos sobre asesinos en serie. Magnus Schmitz hace de un Ulf Olsson muy realista, y demasiado humano, como para poder ser un criminal, o un depredador de niñas. Pero una aguda esquizofrenia hace que se desarme por momentos y muestre una fragilidad, dónde hasta él, es la victima de sí mismo. 

Nota: 6/10.

Comentarios