El universo paranormal de la familia Warren vuelve a las carteleras de cine, con sus dos protagonistas principales, dentro de una saga con muchos altibajos. Expediente Warren: Obligado por el demonio, como reza su nombre, se han visto obligados a que esta tercera parte, no sufra de los malos resultados, tanto en la crítica como en el público. El film ha tenido una producción mucho más elaborada que en anteriores ocasiones. En la tercera misión del matrimonio cambian el enfoque sin modificar sus formas, y menos el resultado, haciendo que esta vez, se base más en una investigación policiaca, a cargo de Lorraine Warren y Ed Warren. Los cuales tienen que mostrar la posesión del diablo, dentro de un asesinato, con ensañamiento. Junto a los habituales Vera Farmiga (Bates Motel) y Patrick Wilson (Insidious) les siguen en el reparto los siguientes actores: Megan Ashley Brown (The Unspeakable Act), como la joven Lorraine Warren; Mitchell Hoog (Richard Jewell), como el joven Ed Warren; Sterling Jerins (Guerra mundial Z), como Judy Warren; Ruairi O'Connor (Alcanzando tu sueño), como Arne Cheyenne Johnson; Sarah Catherine Hook (Blood relative), como Debbie Glatzel.; Julian Hilliard (La maldición de Hill House como David Glatzel; Charlene Amoia (Cómo conocí a vuestra madre [Serie de TV]), como Judy Glatzel; Ronnie Gene Blevins (True Detective II), como Alan Bono; Shannon Kook (La monja), como Drew Thomas; Steve Coulter (Insidious: Chapter 3 ), como Padre Gordon y John Noble (El señor de los anillos: Las dos torres), como Kastner. Para la dirección está un conocido dentro de la saga, por haber firmado uno de sus films más flojos (La llorona). Michael Chaves en su segundo trabajo en la dirección, y otra vez dentro del universo Warren. Nos muestra una trama mucho más adulta, y aunque los giros de guion sigan sin ser su fuerte, hace que te metas dentro de un film sobrenatural, apto para cualquier público que no quiera llevarse un buen susto.
No nos engañemos, aunque anunciasen que esta tercera entrega iba a variar mucho que en las dos anteriores. Expediente Warren: Obligado por el demonio sigue esa senda que se marcó desde un principio. Con un inicio del film totalmente brutal, una investigación, a lo largo de la trama, muy certera, y un final que no deja a nadie indiferente. En sí lleva mucho fuego de artificio, pero no te llega a emocionar, ni mucho menos a sentir algo más que un escalofrío. También puede que sea por el aire acondicionado del cine, que en lo que son las temperaturas, es como si estuviéramos en verano.
Si es cierto que hay muchas escenas del primer exorcismo que me han llegado a estremecer por su brutalidad Después con el asesinato del joven poseído por el demonio, hace que te lleve a lo más oscuro del ser humano, dentro del film. Por su contra, el habitáculo dónde se hacen las maldiciones, es uno de los puntos más flojos, no por su complejidad, sino porque no se sale de lo convencional, y ahí también podrían haber jugado una buena baza para reorientar las escenas.
Dentro del film, y muy visualmente llegan a rendir homenaje con una imagen al film de "El exorcista (1973)", donde la llega del exorcista a la casa de los Glatzel, mostrándonos la misma perspectiva con la llegada del Padre Lankester Merrin, pero con distinto fondo.
Nota: 6'5/10.
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