El director novel Luc Knowles tras haber realizado un primer cortometraje Wonderful people en el 2018. 4 años después regresa con su primer film Libélulas. Una historia de marginalidad a las afueras de Madrid. Dónde 2 amigas sueñan en encontrar una vida mejor, pero, sin corregir ni uno de los errores por el cual se ven inmersas en un círculo vicioso. Para el film el director cuenta con la presencia de la nominada a los premios Goya, Milena Smit (Madres paralelas), como Cata acompañándola en el reparto principal: Olivia Baglivi (Las niñas de cristal), como Alex; Javier Collado (Los misterios de Laura), como Vico y Gonzalo Herrero (Los primeros días), como Jota.
Libélulas es la historia de Cata y Alex, dos amigas que las une el sueño de una vida mejor, pero con diferentes propósitos. Los cuales no hacen que sean lo suficientemente sinceras entre ellas. De aquí que se vuelquen en un círculo vicioso, del cual pesa más su sentido que su realidad.
Libélulas nos muestra la realidad de dos amigas que viven en un mundo de sueños, dónde chocan constantemente en una realidad demasiado oscura para ellas. Cata y Alex se hacen de complemento, mientras Cata tiene que lidiar con una realidad mucho más lejana que Alex. Esta intenta ir por la vía más fácil. La que la han enseñado en su casa y, aunque ella luche por no quiere verlo, al final se va convirtiendo en un ser egoísta, una persona que no sabe respetar sus promesas con su amiga. La sombra de una madre que constantemente pensaba en sí misma, sin mirar todo el río de problemas que podría acarrear con cada una de sus decisiones.
A pesar de tener un vínculo muy fuerte, Cata y Alex se sumergen de pleno en una adolescencia que, lo único real que hay en sus vidas es vivir como sea. Mientras que Cata tiene en su cuidado a un padre convaleciente, el cual fue un maltratador y alcohólico, Alex vive en su mundo de hadas dónde su prioridad es salir en busca de una nueva oportunidad, sin pensar cual es esa oportunidad que quiere vivir. Por lo cual no se van enterando que cuanto más sea su sueño, mayor debe ser el esfuerzo por llegar a conseguirlo.
Luc Knowles nos deja un film bastante desigual. Estoy seguro que algún día empezaremos a ver barrios de gente desamparada muy cercanos a los que vemos en las películas norteamericanas. Casas prefabricadas y caravanas, mientras que ahora es más bien casas hechas con uralita, ladrillo, cemento, pallets y plásticos. Lo mejor del film es ese final dónde emula mucho a Traffic, con una tendencia a Moonlight. Pero sin la cuestión racial de por medio y si una visión real de las diferentes clases que hay dentro de los clanes mafiosos o dentro de las personas más desfavorecidas. Estoy seguro que este primer plato del joven director, hará que nos muestre un potencial que está por llegar. Aunque no es un empiece por todo lo alto, si que muestra brillos de grandeza en muchas escenas logra que, a pesar de la debilidad de las dos protagonistas. Las dos actrices llegan a hacer un buen ejercicio en la interpretación.
Nota: 5/10.
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