MUERTOS S.L. (3ª temporada) vuelve Con los cuchillos más afilados y las mentes más retorcidas

Muertos S.L. le hace la cobra a Movistar Plus y una vez que, la serie está casi terminada de rodar su tercera temporada. De una forma sorprendente sus creadores deciden mudar Muertos S.L. al canal de Netflix. Estoy seguro que este hecho también podría caber para otra ficción donde la carne es muy jugosa y que, aunque nos estén diciendo que, la cuarta temporada no este todavía confirmada por parte de Netflix. Desde aquí os puedo decir que nadie abre una ballena para untar una simple tostada. Alberto Caballero, Daniel Deorador, Julián Sastre, Nando Abad y Araceli Álvarez de Sotomayor han hecho que una sitcom española pueda llegar a tener mucho éxito, ya mostrándolo con productos como "Aquí no hay quien viva" de Alberto Caballero, "La que se avecina" de Alberto Caballero y Daniel Deorador o "El pueblo" de Alberto Caballero, Julián Sastre y Nando Abad. En esta ocasión siguen las andanzas de una funeraria, fundada por un señor que no era tal y como lo concibieron toda su familia. Como su viuda tiene que lidiar con las hurracas que tiene como hijas y los empleados. Que son de todo menos la alegría de la huerta.

Con MUERTOS S.L. el equipo de Alberto Caballero nos vuelve a mostrar ese lado tan poco simpático dentro de un trabajo que de por sí, ya es un tanto deprimente. Ver como ese es el destino al que cada uno sucumbiremos algún día, ley de vida. Como la ambición viste de cordero a algún lobo que quiere hacerse con la empresa como si fuera otro digno heredero de ésta, a el típico empleado que está por estar y no se le puede pedir más que su presencia puntual a la hora de realizar sus tareas diarias.

En su tercera temporada regresan para demostrarnos que Dámaso Carrillo (Carlos Areces), no tiene fondo a la hora de caer y que puede ser tan mezquino que la palabra compañero se le hace demasiado grande. Con su alumno becado Pablo Morales (Roque Ruiz), el cual le va gustando mucho más un puesto que aprende de la persona más déspota con la que te puedas encontrar en la vida. La nueva directora Vanesa Hernández (Amaia Salamanca) contratada por las hijas para que estás tengan más control sobre las decisiones de la empresa. Además, que Abel Aguado (Gerald B. Fillmore), sigue siendo ese friki enamorado de la secretaria Olivia (Aitziber Garmendia), una hipocondriaca de manual o, Nieves Torralba (Ascen López), viuda de Gonzalo Torregrosa. Una mujer que, a pesar de no tener ningún don para ser empresaria, decide coger las riendas de la empresa, no venderla y enfrentarse a sus dos hijas, las cuales la estarán poniendo espías para que quiebre la empresa. No quiero olvidarme de Chemi (Diego Martín), el aún yerno de Nieves, el cual con sus ideas tan bobas pueden llegar a hundir en el mar cualquier cosa.

Con los cuchillos más afilados y las mentes más retorcidas, Dámaso y Nieves emprenderán una batalla entre los dos. Donde se diseminará todas las carencias de los empleados que tienen en la empresa. A través de los diversos gags entraran en temas como el derecho al sindicalismo, la precariedad laboral, los salarios tan bajos o el difícil acceso que se tiene hoy en día a la compra de una vivienda, además de tratar temas sociales como el divorcio, los problemas de las manutenciones de los hijos separados, el alcoholismo dentro de los puestos de trabajo o esa falta de empatía que te demuestra en muchas ocasiones la línea tan delgada entre compañerismo y compañero.

Nota: 6´5/10.