THE RUNNING MAN es valiente en su propuesta pero, se queda a medio gas en su contenido

El director de La última noche en el Soho Edgar Wright. Mira hacia el pasado para poder hacer el remake del film protagonizado por Arnold Schwarzenegger The running man, más conocida como Perseguido. Basada en el libro del maestro del terror, Stephen King. Con el nombre de El fugitivo, la cual fue publicada bajo el seudónimo de Richard Bachman. Seudónimo con el que llego a publicar varias novelas y por el cual llegaría a recoger varios fracasos comerciales, siendo este uno de sus ejemplos. 

El film está protagonizado por: Glen Powell como Ben Richards; Katy O'Brian como concursante; Daniel Ezra como Bradley Throckmorton; Karl Glusman como un cazador; Josh Brolin como Dan Killian, el productor de la serie; Lee Pace como Evan McCone, un cazador; Jayme Lawson como Sheila Richards, la mujer de Ben; Michael Cera como Bradley Throckmorton; Emilia Jones como Amelia Williams y William H. Macy como un hombre que ayuda a Richards cuando está huyendo.

Ben Richards es un obrero del metal que es injustamente despedido con una hija enferma y una mujer que ejerce de dama de compañía en un Club. Ante la falta de oportunidades, teniendo que buscar el dinero para poder curar a su hija y que no llegue a perecer de una bronquitis, decide apuntarse a uno de los programas, dónde los jugadores no vuelven de la misma forma que la que van. Deseando esquivar The running man, al final se verá metido en una vertiente de corrupción y desigualdades en un mundo enfermo, radicado por una anarquía controlada desde las esferas del poder.

Edgar Wright reescribe una historia, trayéndola a las fricciones más actuales, donde el héroe de la historia no es un soldado (como en su versión de los años 80), sino un trabajador normal. Despedido por denunciar ante el sindicato de trabajadores un hecho delictivo por parte de la empresa en la que trabaja. The running man esconde una crítica hacia la sanidad privada, donde los enfermos no son pacientes, sino clientes. Dentro de un sistema sanitario totalmente precario por el que el precio del dinero es el que marca totalmente el estado de tu salud y el de tu familia.

Como se dirige a la población desde los medios de comunicación, haciendo y deshaciendo héroes o villanos, según la conveniencia del poder mediático. The runing man nos dibuja una sociedad que está cercana de su autodestrucción. Donde el raciocinio ha dejado de existir para empezar a sobrevivir.

Pero en medio de todo ello, existen un grupo de personas que luchan por desenmascarar a los poderes facticos del estado y a través de las diversas redes sociales van desmantelando todos los bulos con los que van envenenando a la población. Personas anónimas que, nos muestran que muchos de ellos provienen de haber sido traicionados por las mismas personas con las que se enfrentan. Esa justicia que se creen los que más creen en la justicia y que fueron engañados por aquellos que hacían de toda la verdad un negocio para poder lucrarse. Otra fracción de l@s extranjer@s que viven en el país y que luchan todos los día por no ser deportados en unas formas que son totalmente inhumanas.

Aquí es donde empieza a flojear la película, nos muestran una sombra, la cara más visible del programa, la persona que controla la red de la programación con la que van eliminando a esa parte de la sociedad que quieren ir destruyendo. Pero no nos ponen a los verdaderos jefes, no señalan a los verdaderos responsables. Esos que ponen el dinero sobre la mesa. Para que el mundo esté tal y como nos muestra el film. Un mundo que está cercano al apocalipsis.

The runing man es un film antisistema donde nos muestran que los verdaderos enemigos, o los malvados más peligrosos son aquellos que, económicamente tienen el control para poder hacer y deshacer dentro de un mundo donde la humanidad está devorando al ser humano.

Nota:7/10.