Parliament, 3 culturas diferentes para saber que en realidad, la política da risa...

Parliament es una creación del guionista Noé Debré, más reconocido por haber firmado guiones en films como Deephan del prestigioso director Jacques Audiard (Un profeta), La Resistance de l'air del director Fred Grivois (La intervención), o El mundo es tuyo del director Romain Gavras, hijo del célebre Costa-Gavras. Para esta ocasión cuenta con la dirección de dos directores jóvenes, la directora  Émilie Noblet es una directora más reconocida por su trabajo con los cortometrajes, llegando a tener varios premios, además de hacerse con el premio cámara de oro del festival de Cannes en el 2017 por su labor a la dirección de cámara en el film  Jeune Femme de  Léonor Séraille, ejerciendo también de los labores de producción para la serie de HP  (OCS), y Jérémie Sein natural del País Vasco, llegó a dirigir y escribir la primera temporada de la serie TÉTARD en el 2017. Teniendo en su haber el premio Villa Medici en Roma, conseguido en el 2016 por el cortometraje BEACH BOYS, producido por el departamento de producción de La Fémis, escuela donde se graduaría en el 2015.

Para recrear la serie cuentan con el siguiente reparto: Xavier Lacaille (Section de Recherches) como Samy, Liz Kingsman (Borderline) como Rose, Philippe Duquesne (Bienvenidos al norte) como Michel, William Nadylam (Animales fantásticos: Los crímenes de Grindelwald) como Eamon, Christiane Paul (Paranoico) como Ingeborg, Lucas Englander (Catalina la Grande) como Torsten, Jane Turner (Big Girl's Blouse) como Sharon, Niccolo Senni (Los feos) como Guido y Carole Weyers (La Habitación) como Janet.


Dicen que el que no sirve para nada, pero tiene una buena lengua, entonces sirve para ser un buen político. Esas personas que se dan de patadas lingüísticas en un parlamento, sin llegar a construir algo realmente productivo, o que sirva para una inmensa población. Si a eso, le sumamos que, en vez de ser un país, es la aglomeración de varios países, luchando cada uno por sus "propios intereses", entonces el circo de la carnaza está bien servido. En Parliament nos muestra las andanzas de Samy Kantor, un joven francés, "ayudante", "becario", o como mejor lo asignen, con muchas ganas de servir a su país en el parlamento europeo, a través de una persona, que lleva sirviendo lo mismo que puede hacer un cactus, un jarrón, o una fotografía de esas que colocan encima de las mesas, es decir, de adorno. De esta forma tendrá que esforzarse para poder hacer el cometido de alguien que, casi ni sabe dónde está la sala de fotocopias del edificio. De ahí que encontrar la ayuda de otros ayudantes, los cuales sirven tanto como su jefe, y de los buitres llamados lobbies, los cuales están más para ayudar los intereses privados, para que las políticas del fondo europeo vayan más en beneficio para sus clientes, que para el conjunto de la unión europea.

Pero en el trato en las relaciones, no es todo negro sobre gris, y siempre puedes encontrar la ayuda de las personas que menos te lo esperabas. Conociendo al ayudante alemán Torsten, o a Rose, la ayudante británica que está capeando la salida del Reino Unido de la Unión Europea, y además de una jefa con serios problemas de alcoholismo, y actitudes denunciables, con el trato de los fondos europeos que ella maneja. Ante todo, Samy busca encontrar la ayuda de sus dos nuevos amigos para poder llevar la enmienda sobre el aleteo de los tiburones para que sea aprobada dentro del parlamento. Cosa que tenía que hacer su propio jefe, pero que después de bastantes años, no tiene ni la menor idea de cómo hacerlo. 

Parliament sabe cómo jugar con los roles de los personajes, hasta tal punto que te lleva a dar un tanto de vergüenza por todo lo que podrás visualizar, y que al final no lo puedas llegar a comprender o entender. Como ven, de la política actual no va a ser todo malo, a veces también te enseñan a reírte de sus propias inaptitudes. 

Nota: 8/10. 

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