CRY MACHO Clint Eastwood se viste de John Ford para contarnos una historia que va en declive todo el momento

A sus 91 años, el gran Clint Eastwood se llega a comportar como una clásica estrella del Rock N' Roll. Lleva más de una década anunciando su retirada, como actor, de los escenarios, pero al final nunca encuentra ese punto medio para poder dar por acabada su carrera. Cry Macho no llegará a estar entre sus mejores films, pero a su edad, ya poco importa lo que él quiera dar a demostrar, puesto que este negocio ya le sienta como un juego, al que uno se a adherido, y que por amor a lo que ha sido una vida dentro del Séptimo arte. Llevará todo esto hasta que la madre naturaleza cumpla con su cometido. Cosa que espero que tarde mucho en llegar. Para poder realizar el film cuenta con el siguiente reparto, encabezado por el propio Eastwood: Clint Eastwood (Gran Torino), como Mike Milo; Eduardo Minett (La rosa de Guadalupe), como Rafael «Rafo» Polk.; Natalia Traven (Bajo el cielo de Tres Cruces) como Marta; Dwight Yoakam (Lazos de sangre), como Howard Polk; Fernanda Urrejola (Narcos: México), como Leta; Horacio García Rojas (Julia), como Aurelio y Ana Rey (Larga vida y prosperidad), como la señora Reyes.


Clint Eastwood se aleja de los estereotipos de héroe callejero, para contar historias sencillas y comunes, dentro de las clases más desfavorecidas. Si lo que se busca es a un nuevo Harry Callahan, o a un nuevo pistolero sin nombre, este no es el film que realmente te llegue a gustar. Más bien trata de romper estereotipos, de buscar ese sitio en la vida, que nunca se llegó a encontrar, y sobre todo, no es una road movie al uso. Es un film dónde la carretera es el último elemento de la historia, aunque tiene unos planos que son impresionantes. Trata de resolver una deuda con la propia vida.

¿Qué es lo que no me ha gustado del film?

La poca credibilidad que llega a tener las relaciones de los propios personajes. En algunas ocasiones llegan a forzar mucho las escenas, y el propio guion tiene muchos agujeros, que hacen un final, demasiado frío. Aunque el final sea el más correcto de todos.


Lo mejor de todo, es que el maestro Eastwood tiene cuerda para rato, y de alguna forma, hace que el sabor del cine clásico, siga vivo en las pantallas. Sin que este sea hecho a basa de ser un autoplagio. 


Nota: 5'5/10


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